Alejandro Rejón Huchin recibe la distinción de Huesped Distinguido de Salamanca en España.

Discurso de Alejandro Rejón Huchin al ser nombrado Huésped Distinguido de Salamanca

Gracias a la trayectoria literaria del poeta mexicano Alejandro Rejón Huchin, el Ayuntamiento de Salamanca en España, le ha otorgado la distinción de Huésped Distinguido, no solamente por sus logros literarios, sino también por su destacada gestión cultural en la que ha unido a los pueblos hispanohablantes de este mundo.

Les dejamos entonces las palabras que el autor compartió al recibir esta distinción:

El filósofo francés Jean Luc Marion nos ha enseñado que un fenómeno saturado es cuando la cantidad de intuición que entra en la recepción rebasa a todo concepto, a toda cosificación sobre el fenómeno, y se dona de manera directa a la conciencia, deslumbrando a la mirada, dejando ciega toda noción cosificada que el acto de explicar pueda dar desde una lógica con poca intuición, por ejemplo, desde una lógica cuya visión del fenómeno se proyecte desde la razón instrumental.

El amor sería un ejemplo perfecto de fenómeno saturado, porque no necesitamos realmente explicarlo, podemos intentar hacerlo, pero el amor se da más allá de nuestra lógica de abstracción y cosificación de los fenómenos, se nos dona desde el ágape directamente a la conciencia sin una precisa necesidad de entenderlo sino más bien de comprenderlo como una epifanía que nos guía en la vida, que nos lleva a un estado más puro y teleológico de la vivencialidad y la conciencia.

Así pues, este acontecimiento, que además de ser único y extraordinario en mi vida, lo veo como un fenómeno saturado, porque realmente no hay tantas palabras, no hay una teoría, no existe una explicación para describir lo que estoy sintiendo y la gran generosidad que acontece y que acontecerá siempre sobre mi obra de parte de la muy noble, culta y docta ciudad de Salamanca, una ciudad que me ha acogido desde su cultura y sus saberes, más que como huésped como amigo y que me ha abierto las puertas de par en par en su XXVI Encuentro de Poetas Iberoamericanos, con esto expreso de la manera más confesa que estoy insólitamente conmovido, no solamente por la oportunidad que le están dando a un visitante yucateco que ha realizado gestión cultural, investigación y promoción académica de la literatura desde la periferia de México, donde los esfuerzos tienen que sumarse más, sino por la sincronicidad que este acontecimiento guarda en la historia entre Yucatán y salamanca, una historia muy profunda y enraizada, en cuya relación entre dos grandes pueblos como lo son el salmantino y el yucateco se hermanan en ese constante diálogo cultural tan único, singular e irrepetible, en ese archi-acontecimiento de intercambios culturales y sociales que ha nutrido a dos naciones como lo son la española y la mexicana.

Dicha sincronicidad reside en un personaje salmantino, el adelantado Francisco de Montejo, que durante su visita en la península de Yucatán durante el siglo XVI dio el nombre de Salamanca a 8 ciudades que se fundaron a partir de la llegada de los conquistadores españoles, en ninguna de las localidades o ciudades se conservó el nombre hasta en nuestros días, sin embargo, existen hechos históricos que dan fe de lo  mencionado, entre ellos, tal vez los casos más sonados el de Xel Ha en el estado de Quintana Roo que fue nombrada así por el propio Francisco de Montejo en 1527  y el caso de  Champoton nombrado como Salamanca por Francisco de Montejo(el sobrino) en 1531.

Hoy también es un día histórico para la península de Yucatán, pues 5 siglos después de que Francisco de Montejo fundara estas ciudades salmantinas me encuentro como ciudadano yucateco recibiendo de parte del Ayuntamiento de Salamanca el título como Huésped Dstinguido de Honor de la ciudad, lo cual marca un hecho sin precedentes en la historia entre la península de Yucatán y Salamanca, algo jamás pensado por un servidor, una experiencia que no puedo aprehender con la razón sino que puedo comprender desde el corazón, porque si, esta es una donación pura de la vida que simple pero milagrosamente se da como un testimonio de la unidad entre dos grandes pueblos y como un reflejo único e irrepetible de la incalculable generosidad  que tiene el pueblo salmantino.

Esta relación Salamanca-Yucatán me hace pensar en el símbolo y fenómeno de la otredad como trascendente en tanto que el otro es ulterior al sí-mismo, es decir, está ahí como parte de esa finitud trascendente del mundo, porque justamente antecede a mi propia proyección de ser-en-el-mundo. Si bien, las relaciones entre otredades a lo largo de la historia tienen sus respectivas vicisitudes, lo que nos une finalmente es esa donación pura del fenómeno saturado, porque finalmente cada experiencia, cada intercambio cultural, social, artístico o político tiene contenido en si un anhelo por buscar al otro, por unir puentes, por ser y partir de algún modo desde la fraternidad y comprensión al otro, hablamos pues de una hermenéutica, de un diálogo constante que se eleva en la otredad, y hoy ese intercambio, ese hermanamiento entre Yucatan y Salamanca, esa dialogicidad, emerge como un testimonio de esa necesaria ética de aperturarse al otro.

Debo decir que entre mis primeras lecturas de juventud estuvieron presentes el Lazarillo de Tormes , La Celestina, la bella filosofía existencial de Miguel de Unamuno, todos ellos, personajes y obras literarias que son parte de Salamanca, y hoy, después de cruzar el océano, ser recibido como huésped distinguido en una de las ciudades más importantes para la cultura, las humanidades y la literatura universal es un honor único e irrepetible en mi vida que agradezco al Ayuntamiento y la ciudad sintiéndome en la responsabilidad de ser un embajador de salamanca en mi tierra, de llevar el nombre y la gran cultura salmantina en todos los rincones de la península de Yucatán, por lo que en mí tienen un amigo que siempre llevará el nombre de Salamanca en alto desde su terruño, así como hoy llevo en alto el nombre de mi Yucatán, mi tierra del Mayab desde el honor que se me ha concedido al pisar suelo salmantino con la presente condecoración.

Por tanto, mis gratitudes no solamente son por hacerme parte como testimonio histórico de esa unión, sincronicidad y hermandad entre dos pueblos que comparten en común su gran historia y diversidad intercultural, sino por ser un ejemplo fehaciente de bondad, al reconocer con tan alto honor el trabajo literario, cultural y académico de un servidor.

Gracias Salamanca por iluminarnos siempre con tus vestigios, cultura, saberes y humanidades, por ser en ellos perpetuamente un ejemplo para el mundo, infinitas gracias al alcalde Carlos García Carbayo por su enorme hospitalidad y generosidad al entregarme esta distinción histórica del pueblo salmantino, a Alfredo Pérez Alencart por su inagotable generosidad, trabajo inalcanzable de reunir a Iberoamérica en la poesía año con año y por fomentar estos reconocimientos y encuentros tan necesarios para el mundo en que vivimos, a todos los que hacen posible este encuentro, digo gracias con el corazón abierto porque hoy y siempre Salamanca es testimonio donde emerge la unidad en su sentido más puro.

Alejandro Rejón Huchin

Alejandro Rejón Huchin recibe la distinción de Huesped Distinguido de Salamanca en España.Discurso de Alejandro Rejón Huchin al ser nombrado Huésped Distinguido de Salamanca