ESCARLATA
Intolerante a tus frases trilladas
Mirada tajante al vacío
Dibujo un cordero y se me escapa
Camino descalza en el río
Sin anestesia me practico la ruptura
Descongelo las nubes para abrazarlas
Lloro y lloro asfixiando mi fortuna
Gritando, maldiciendo, huyendo de la escarlata
Me miro serena y solitaria
Orillándome demasiado al abismo
Sintiendo mis huesos y mi destino
Odiando no encontrar tus punzadas
Me lastimo el corazón con miedos
Con recuerdos, risas, tristezas y enredos
Me quedo al pie de mi cama
Durmiendo y acobijando mi alma
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LODO RASCACIELOS
Y me traicionas, me sucumbes
Me arrebatas mi armonía erguida
Sólo piensas en cuanto tú sufres
Regocijándote en mi herida
Y me pisas con un señuelo
Me muestras los códigos negros
Me dejas en completo duelo
Me regalas un tonto espejo
Y me avientas al lodo rascacielos
Salpicando tu premeditado veneno
Escondes la mano en tu pecho
Me desarreglas con tus recuerdos
Y me lastimas con metales imaginarios
Limpiando la apariencia de tus fotos
Asombrándote de los truenos obsoletos
Galopando mi corazón con tu rosario
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ME OLVIDASTE
Me olvidaste, las llagas de mi espalda duelen como el último fuego de mi corazón. Ya no te encuentro por ningún lado, solo eres la silueta fracasada de mis labios.
Me olvidaste, las fotos que, alguna vez, nos tomamos se perdieron entre las rocas desconocidas de agosto. Ya no te busco para evitar burlar el destino con escapes inconclusos, el fragmento de tu último beso aún me acompaña en mi soledad, con cautela, con hambre, con ambición, con envidia.
Me olvidaste, sin un juicio póstumo, sin una señalética justa entre mis venas. Volteo hacia mis cabellos, se están volviendo grises, el tiempo sigue y sigue pasando la aventura de mi vida se alimenta con tus silencios, no te odio, no te olvido, te amo, te amo aún más que mi día de ayer. Te amo sin rencor, con preguntas, sin olvido, con anhelos.